Confederaciones Rurales Argentinas (CRA) anunció su retiro de la Mesa de Competitividad Lechera, argumentando que en la misma no se analizan y resuelven los problemas de coyuntura que afectan al tambero. Además, precisaron que volverán a formar parte de dicho ámbito, “si la agenda condice con la realidad a solucionar” y pidieron “un cambio de actitud o un cambio de funcionarios”. Vale recordad que meses atrás, la misma decisión la había tomado la Mesa de Productores de Leche de Santa Fe.
En un comunicado de prensa, desde CRA se pronunciaron preocupados “por el rumbo y los resultados de la última reunión de la Mesa de Competitividad Lechera, donde la posición de la Dirección Nacional de Lechería es trabajar en el largo plazo, y eso se contrapone con la necesidad de trabajar en resolver los problemas que hoy padecen los productores”, precisaron desde la entidad que preside Dardo Chiesa, y agregaron, “no estamos haciendo nada para que no desaparezcan tambos”.
En el documento también se expresó que la situación actual de la lechería enfrenta un mercado interno contraído, exportación errática, incertidumbre cambiaria, altas tasas de interés, conflicto de intereses, productores trabajando por debajo de los costos, “y desde el sector oficial están armando un tablero de control”.
Para Jorge Chemes, Vicepresidente de CRA, la situación de la lechería está transitando una crisis profunda: “Nosotros no encontramos el eco necesario dentro de la mesa de Competitividad lechera sobre las cuestiones de coyuntura que es el tema precio que recibe el tambero. Valoramos que la cuestión de mediano y largo plazo se está trabajando y muy bien con todo el desarrollo de la información a partir del Siglea, pero consideramos que si no solucionamos el problema coyuntural inmediatamente van a seguir quedando productores fuera de la actividad y de esta manera no colaboramos a que el sector pueda encontrar las medidas que pueden ser la solución a los problemas actuales de la lechería”.
Andrea Passerini, tambera de la provincia de Buenos Aires y Coordinadora de Lechería de CARBAP, en diálogo con este medio, precisó. “Hubo un desgaste progresivo, ya que desde hace meses nos veníamos preguntando si valía la pena seguir concurriendo a la Mesa de Competitividad Lechera, en una coyuntura que se fue agravando desde abril hasta nuestros días, donde los tamberos que siguen en la actividad están en una situación muy crítica y los que tuvieron que cerrar el negocio, lamentablemente lo hicieron malvendiendo las vacas a los frigoríficos. Veremos ahora cual es la reacción del Gobierno ante este panorama. Nosotros no rompemos el diálogo, acá ya no había diálogo, solo había dos monólogos, y dos monólogos no hacen un diálogo. Reiteramos que el precio que hoy le falta al tambero está en la cadena láctea. Hay que fijarse el precio en los comercios de los lácteos y en qué situación están las industrias que pueden trasladar sus costos y ajustan parte de sus costos, porque el 80% del costo de la industria es la materia prima nuestra”.
